«(Netanyahu) ha sido cuestionado durante tres horas en su residencia. En este punto no hay más detalles que aportar», se limitó a decir la policía en una nota oficial.
Antes de que comenzara el interrogatorio, Netanyahu aseguró que la investigación policial terminará en nada como ocurrió con otras investigaciones anteriores.
«Todavía no lo celebres», dijo Netanyahu refiriéndose aparentemente a la prensa.
El líder de la oposición de Unión Sionista, Isaac Herzog, le respondió que no hay razones para celebrar.
«No es un día alegre. Es un día duro para Israel», manifestó Herzog, citado por el diario Ynet.
El líder israelí debía responder a las sospechas de haber recibido importantes regalos y beneficios de empresarios, al menos uno israelí y otro extranjero, que han aparecido en dos investigaciones policiales sobre casos de soborno y fraude.
Los medios indican que la policía ha recabado suficiente información para abrir en los próximos días una investigación contra Netanyahu.
El procurador general de Israel, Avichai Mandelblit, realizar pesquisas desde junio sobre las denuncias contra el primero ministro y recientemente recibió nueva información que podría permitir abrir una investigación criminal en toda regla, reseñó el Canal 2.
También, según los medios locales, desde junio el jefe de la policía israelí, Roni Alsheikh, ordenó a Lahav 433, unidad especial de la policía, investigar a Netanyahu, pero pidió discreción y no filtrar información.
Benjamin Netanyahu es acusado de recibir grandes cantidades de dinero del multimillonario francés Arnaud Mimran, condenado en julio a ocho años de prisión y una multa de un millón de euros por fraude al impuesto sobre el carbono.
El primer ministro israelí también es señalado de utiliziar dinero público para viajes personales junto a su familia. En 2015 gastó 600 mil dólares de dinero público ( mil 600 dólares en un peluquero) en un viaje a Nueva York, Estados Unidos.
El político israelí David Amsalem, aliado de Netanyahu, propuso una legislación en el Parlamento para dar inmunidad al primer ministro por «delitos menores».