Tras presentarse voluntariamente, el expresidente de la Generalidad de Cataluña Carles Puigdemont y los cuatro exconsellers que le acompañan fueron detenidos este domingo en una comisaría en Bruselas, desde donde fueron trasladados a la fiscalía.
Se espera que este domingo un juez instructor tome declaraciones de las exautoridades catalanas, depuestas por España tras la aplicación del artículo 155 por la declaración de independencia pasada. En un plazo de 24 horas el jeuz debe decidir si mantiene la prisión de Puigdemont y los exconsellers o los deja en libertad bajo «ciertas condiciones».
De acuerdo con las leyes internacionales, el proceso de entrega a España podría demorar unos 60 días y otros 30 adicionales en algunos casos.
Los exconseller que acompañan al líder soberanista catalán son Antoni Comín, de Salud; Clara Ponsatí, de Enseñanza; Lluís Puig de Cultura; y Meritxell Serret, de Agricultura.
«Desde el momento que sean privados de libertad, podrán comparecer ante un juez», explicó antes la Fiscalía sobre los catalanes acusados de sedición, rebelión y malversación de fondos públicos por España.
La fiscalía de Bruselas asegura estar en contacto con la defensa de Puigdemont y demás autoridades, que han dado pruebas de que la intención no es la fuga, sino abrir un espacio judicial justo.