Rusia no excluye la posibilidad de una escalada de la situación en el norte de Siria, declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.
«Tomando en cuenta las amenazas de Ankara sobre el inicio de una operación a gran escala contra las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), enfrentamientos regulares entre los kurdos y las formaciones armadas ilegales proturcas, se mantiene alta la posibilidad de una escalada en el norte de Siria», dijo en una rueda de prensa.
Al mismo tiempo, indicó que Rusia destaca una dinámica positiva de la situación política y militar en este país.
«Está vinculada directamente con la implementación de los puntos del memorándum sobre la creación de zonas de distensión en Siria», explicó.
Precisó que, en particular, la situación mejoró en las gobernaciones de Alepo, Idlib, Homs, Deraa.
El memorando sobre la creación de cuatro zonas de seguridad en Siria —en la provincia de Idlib y parte de las vecinas Latakia, Alepo y Hama; parte del norte de la provincia de Homs; el arrabal damasceno Guta Oriental y determinadas áreas de las provincias de Deraa y Al Quneitra en el sur del país— fue firmado durante la cuarta ronda de las consultas sirias en Astaná celebrada el 3 y el 4 de mayo.
El acuerdo, sellado por Turquía, Irán y Rusia, busca afianzar la tregua vigente en Siria a partir del 30 de diciembre y separar a la oposición moderada de los grupos terroristas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y Frente al Nusra, ambos proscritos en Rusia y otros países.
Siria vive desde hace más de seis años una guerra civil en la que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas.
Según los datos de altos cargos de la ONU, entre 300.000 y 400.000 personas perdieron la vida en el conflicto.
