Los trabajos de modernización en el ámbito de las armas nucleares de Rusia son la respuesta de Moscú a los planes de algunos países occidentales de crear un sistema de defensa antimisiles global y desencadenar una nueva carrera armamentista, opinó Gerhard Mangott, experto de la Universidad de Innsbruck, en una entrevista con Sputnik.
El presidente ruso, Vladímir Putin, durante su gran rueda de prensa del 22 de diciembre, se refirió principalmente a las armas nucleares tácticas cuando hablaba sobre la retirada unilateral de Estados Unidos del Tratado sobre misiles antibalísticos, afirmó Mangott.
«Es verdad que EEUU emplazó armas nucleares tácticas en Europa —en los Países Bajos, Italia y Alemania—. Pero en el campo de las armas nucleares tácticas, desde hace mucho tiempo, Moscú tiene una ventaja significativa. Rusia justifica la existencia de este gran número de armas nucleares tácticas por el hecho de que los países de la OTAN tienen una superioridad considerable en cuanto a las fuerzas convencionales», explicó el profesor de Ciencias Políticas.
Sin embargo, según el experto, en los próximos tiempos podríamos asistir a una carrera armamentista de consecuencias impredecibles.
«Hay que tener cuidado, porque Trump dijo recientemente que quiere reforzar el arsenal nuclear de EEUU», advirtió Mangott.
«Entonces, según él [Trump], puede comenzar tranquilamente una carrera armamentista. ‘Nosotros, en todo caso, vamos a ganarla'», afirmó el académico en referencia a las palabras del presidente electo de EEUU.
«Y Putin le respondió: ‘No, Rusia no va a participar en la carrera'», recordó.
