Luis Roa (Aporrea, 7-5-20)
Así como nosotros repetimos como expresión señera que la espada de Bolívar recorre a America; también tenemos que decir que el látigo del capitalismo salvaje del imperio gringo es esgrimido con saña criminal contra aquellos pueblos que decidieron ser libres. Así como han existido hombres que han sido como una luz en las tinieblas, un faro en el camino que le han dado un vuelco a la historia; entre ellos tenemos a Simon Bolivar, Gandhi, Marx, el Che Guevara, Fidel Castro, Chávez. También han existido otros que le han traído guerras, hambre, miseria y desolación a la humanidad; entre ellos Hitler, Mussolini Pinochet, Bolsonaro, Trump…
Hoy para desgracia de la humanidad y de aquellos pueblos que se quitaron las amarras para ser libres y hoy buscan caminos de redención; quien hoy dirige los destinos de la potencia más grande del planeta, es un mandatario soberbio, autoritario, villano, siniestro y peligrosamente diestro en eso de manejar la mentira y la hipocresía; cuando se propone algo, lo hace por las buenas o por las malas; aplicando Las más sutiles amenazas o las mas vergonzosas presiones. Los mas susceptibles a doblegarse son los países más pequeños o los más golpeados por su situación económica. Existen otros que se doblegan ante sus requerimientos sin importarle sus barreras discriminatorias y resentimientos que el imperio siente hacia los pueblos del mundo. Los irreductibles que rechazan con contundencia sus pretensiones de ser su patio trasero son sometidos a sus horrendas y criminales sanciones, bloqueos e invasiones; sino que lo digan Cuba, Nicaragua, Venezuela…que están ahorita en el tapete; ejemplos de otros países los hay a montón.
Nuestro país el pasado 3 de mayo en la madrugada se vio sorprendida por una invasión imperial con la ayuda del gobierno colombiano entrando a través de las playas litoralenses de Macuto en el estado la Guaira; con contingentes conformadas con una infame mezcolanza de mercenarios gringos y colombianos; desertores de las Fuerzas Armadas; traidores, apátridas y para completar tan selecta ralea se le unieron narcotraficantes; que traían como tarea fundamental asesinar a figuras del gobierno nacional, crear caos, violencia y desasosiego en la población. Nuestro ejército los avisto oportunamente y en un intercambio de disparos cayeron abatidos ocho de ellos. Otros se dispersaron y llegaron las playas de Chuao; donde fueron detenidos, mediante una acción épica; donde tomaron parte dos héroes del pueblo, uno un pescador armado de un tubo y un miliciano quien con pistola en mano les dio la voz de alto a la tropa invasora y con la ayuda de todo un pueblo fueron inmovilizados con el nailon que utilizan para pescar. Esta es una demostración fehaciente que aquí hay pueblo ganado para salirle al paso de cualquier ejército invasor con palos, con piedras, machetes o chopos.
Ahora Trump que estaba al tanto de lo que iba a pasar y paso; manifestó públicamente, como una manera de marcar distancia expreso…»que se estaba enterando y que nada tenía que ver con los hechos»; pero luego aparece Mike Pompeo, secretario de Estado, pidiendo la repatriación de los gringos hechos presos; como si los hubiesen detenidos cargando serpentinas y no portando armas que iban a ocasionar muerte y desolación. Mayor descaro e inmundicia. El imperio como que cree que estamos agarrados a lazo…
