Luis Sánchez Ibarra (CTXT, 15-11-19)
En intento propagandístico que finalizó en un bluff, con el abandono de la legación diplomática nuestra en Brasilia, opositores venezolanos en grupúsculo disociado, invadieron la Embajada de Venezuela. «Debemos denunciar este atropello permitido por el Presidente Bolsonaro y sus secuaces«, mensaje en twitt de un Diputado brasileño, condenando la acción ilegal, que significó violación a convenios internacionales, y a la soberanía venezolana.
Una parlamentaria brasileña aseguró también que la acción violentaba «todas las garantías y el respeto a convenios internacionales». Cualquier persona se dio cuenta del miserable comportamiento de quienes hablan de democracia, y no respetan derechos humanos, apoyados en Venezuela por un tartajo bautizado «Juanito Alimaña», ignorante del respeto a la diplomacia mundial.
Lanzaron una mentira diciendo que funcionarios diplomáticos venezolanos en habrían desertado a favor de los intrusos. Otro eslabón en la cadena o rosario de noticias falsas, remitidas por redes como matriz de opinión de la derecha violenta, tesis absolutamente falsa, desmentida por el Canciller venezolano Jorge Arreaza, con fotos y videos.
Encerrados en la burbuja opositora, se montan culebrones mentales, sin superar la incapacidad política de sus dirigentes, quienes no superan esa rabia interna que les perjudica la salud y la de partidarios enceguecidos, vidiotizados o aguaidiotizados mirando al adversario con incontenible odio, y perjudicando su psiquis, actitud solo calmada con insulsa insultocracia, que nada resuelve y los amarga más.
Las pequeñas esperanzas con las cuales se alegran momentáneamente, surgen de episodios en otras tierras. Pierden el horizonte de sus trabajos, acrecientan peleas conyugales, e insuflan rabia confusa en hijas e hijos. Duele ver un compatriota opositor recibiendo un puñetazo en la cara, propinado por un brasilero que se hizo presente frente a la Embajada nuestra en Brasilia, disgustado con los invasores que sospechosamente presentaban síntomas de trasnocho…
Sin duda la avaricia de los «funcionarios» del gobierno paralelo o interino de nada, los convoca en sitios equivocados, pero los capitostes mantenidos con dinero robado al Estado y al pueblo venezolano, prosiguen una ruta terrorista de llamados a insurrección, en convocatorias lánguidas, huérfanas de fervor popular, por lo gris de sus convocantes, que ya ocupan lugares en el degredo de la historia política nacional.
Y si creen que el Estado venezolano no va a sancionar culpables de aliarse con extranjeros contra el país, hay una medida que aplaudo pues francamente ¿hasta cuándo echan vaina?, las cuentas bancarias de 15 personas naturales operadores financieros del írrito «Presidente Guaidó» para movilizar y ocultar fondos durante el ejercicio inconstitucional de una presidencia paralela, fueron bloqueadas por la Unidad de Inteligencia Financiera de SUDEBAN.
Con falacia afirman «vamos a defender los intereses de la nación», ahora van a «chillar más que camión de cochinos», diría Chávez al explicarles que se lo merecen por apoyar bloqueos a barcos y aviones, personas que impiden la llegada de alimentos y medicinas al país. No volverán y sí pagarán ante la Justicia humana y la justicia Divina, es decir ante Nuestro Señor Jesucristo, Jehová, Buda, Alá, Yahvé, o como lo conciba.
