Rusia está preocupada por la situación que se observa en la región siria de Afrín y llama a las partes implicadas a la moderación, declaró la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.
En lo que se refiere a la «operación que Turquía realiza en el territorio de Siria, Rama de Olivo para Ankara, seguimos de cerca la situación y es motivo de gran preocupación», dijo.
La diplomática rusa destacó que «las autoridades turcas afirman que la operación militar, iniciada el 20 de enero en la región de Afrín contra los kurdos de las Unidades de Protección Popular (YPG) del Partido de la Unión Democrática (PYD) se realiza de acuerdo con el derecho de Estado a autodefensa consagrado en la Carta de la ONU y tiene como objetivo eliminar grupos terroristas».
No obstante, destacó Zajárova, «de acuerdo con los informes, en diez días de hostilidades el número de muertos alcanzó varios centenares de personas, por tanto llamamos una vez más a las partes a la moderación».
Turquía lanzó el pasado 20 de enero la Operación Rama de Olivo contra los combatientes kurdos en Afrín, en la provincia noroccidental siria de Alepo.
La operación está dirigida contra los grupos yihadistas y las YPG, brazo armado del PYD.
Para Turquía, las YPG son una extensión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), prohibido en el país por considerarse una organización terrorista.
Damasco condenó la operación turca en Afrín y subrayó que es parte inalienable del territorio sirio.
